Atlas Elipticalis
[ Galería Helga de Alvear 10.05 > 14.07.2018 ]
Monita ad tirones ( a modo de reflexión previa)
Atlas Elipticalis indaga la complejidad de los modelos de relación y la sobreabundancia de elementos, emocionales o intelectuales, físicos o psíquicos que ligan o tejen la vida y hacen de ella un estado vibrante en el que nos agitamos… pero casi nunca sin ofrecer resistencia. Resistencia que expresamos con esfuerzo y con herramientas que desarrollamos con mayor o menor destreza espiritual o técnica.
Atlas Elipticalis, hace referencia a una composición de carácter musical de John Cage casi del mismo nombre, Atlas Eclipticalis (1961/62), que estuvo inspirada en los trabajos del astrónomo checo Antonin Becvár (1901) quien produjo mapas estelares de inmensa utilidad a lo largo de décadas (50’s). La obra de Cage emplea los mapas estelares de Becvár para desplegar y aplicar en base a ellos Operaciones azarosas y de transformación.
En esta ocasión cuento con la intensa colaboración de un grupo de artistas que desarrollan su actividad en diferentes campos de la estética y la creación contemporánea. Se trata de Mieke Bal, Agustín Fernández Mallo, Kenneth Goldsmith y Tálata Rodríguez, que aportan sus ideas sobre la probable y relativa conexión existente entre el par elipse y elipsis. Sus reflexiones son grabadas en cintas magnetofónicas de audio y adheridas a grandes campos de color pintados y sutilmente texturizados para orbitar en torno a ellas mismas.
# Primeros materiales y apuntes para la investigación y desarrollo del proyecto.
# Primera referencia bibliográfica: La conferencia perdida de Feynman / El movimiento de los planetas alrededor del Sol. Tusquest 56.
# En lingüística, la elipsis (del griego ἔλλειψις, élleipsis, "omisión") o construcción elíptica es una figura retórica que consiste en la omisión de una o más palabras en una cláusula que, aunque sea necesario para la correcta construcción gramatical, se sobreentiende por el contexto. Hay numerosos tipos de elipsis reconocidas en la sintaxis teórica.
# Una elipse es la curva cerrada con dos ejes de simetría que resulta al cortar la superficie de un cono por un plano oblicuo al eje de simetría –con ángulo mayor que el de la generatriz respecto del eje de revolución. Una elipse que gira alrededor de su eje menor genera un esferoide achatado, mientras que una elipse que gira alrededor de su eje principal genera un esferoide alargado. La elipse es también la imagen afín de una circunferencia.
# Para la topología una circunferencia es equivalente a una elipse... una esfera a un cubo... un cuadrado a un círculo...
# Ø como foco F (el Øbjeto > 0) S en tanto que foco F' (el Sujeto) entre ambos, y dentro del contexto, construyen el punto de vista y todas las posibles interacciones...
# ... es un intento de descripción: S ve Ø... y trata de establecer un vínculo: intersección, unión, pertenencia, etc... Ø está para ser descrito; S para describir. Ambos engendran sentido.
# ... "esto o aquello me resulta indescriptible" L. Wittgenstein >.
[ imágenes / bocetos / apuntes / notas ]
[ imágenes / montaje y exposición Galería Helga de Alvear. Madrid ]
[Modulación de imagen (elipse / elipsis / hueco)], 2018. Instalación de imagen sobre pared. Medidas variables.
(visto hoy) 25_10_2024
A modo de difracción…
Primero una sensación, un pensamiento que llega a emocionarte de manera “nebulosa”, y ahí te quedas. El proyecto avanza y retrocede y piensas, más o menos, en lo que estás haciendo. Atas cabos (los tuyos a los de los demás; los de antes y los de aquellos que te rodean ahí, en tal momento –dilatado). Pero la cosa no para y observas lo realizado, su inquietud y la tuya, y sigues en ello aunque ya esté fuera de ti y los demás lo estén observando con menor o mayor atención: ellos en su nebulosa. Bien, pero tu también gozas de esa exterioridad embriagadora que da la cosa ahí afuera, su tesoro significante sobreabundante de señales y signos.
Esto es lo que me pasa con una de las obras de Atlas Elipticalis, sigo pensando en ella. No fue la ultima en ser configurada, pero fue a parar, cierta posible secuencia lógica, al final del recorrido del proyecto (aunque haya que volver sobre nuestros pasos para salir de la galería).
La vi en mi estudio, la dispuse en el espacio, y en todo momento la observe con particular curiosidad. Sigo pensando en ella y acabo de descubrir que no puede ser de otra manera, que no se dará de otra manera que no sea aquella bajo la que fue pensada. Un proyector de 16mm, cola de celuloide negra y la fragilidad "insensible" de su loop; la fragilidad alimentada por la erosión y el roce al pasar por los dientes_guía del proyector. Su romperse, saltar, y volver a empezar. Hay que cuidarla y preocuparse por ella: mantenerla (cambiar su luz y cambiar su película –la misma, y sin embargo diferente, cada vez y una y otra vez.
No pudo ser pensada en video, quizás más cómodo. El vídeo mismo no se puede perforar, la superficie misma del celuloide sí: es la fuente (su océano de Dirac). La virtualidad de la imagen digital no permite según que manipulaciones en la materia de su hacerse efectiva la imagen (sí en el software o al calentar la circuitería: glitch). Solo en lo analógico de su estar en celuloide (lo que de el queda no perforado) la obscuridad en el espacio puede modular(se) con la luz que el proyector lanza sobre la pared. Si grabo la imagen en vídeo y la proyecto, vuelta a la comodidad, grabo el espacio mediante, la luz_resto que arrastra el vídeo en la captura y en la proyección, todo filmar que no sea perforación en celuloide. Aquí no hay más proyección que la de la luz al pasar, invisiblemente difractada (si fuera posible esto) a través de una quemazón (quizás cegazón) en la película_historia misma. Luz rodeada de la obscuridad necesaria (la que haya o sea dada): un corte, que nos abre una ventana, un hueco, a nada más que luz, más luz¡!... y su correspondiente penumbra.